Maids of honour

Receta de Nigella Lawson para preparar unas tartaletas cremosas con un toque de limón (llamadas «maids of honour»), clásicas de Navidad

Queridos lectores y lectoras, aprovechando la feliz época Navideña, no puedo resistirme a compartir con vosotros otra receta del capítulo de Christmas del libro How to be a domestic goddess de Nigella Lawson, ya sabéis, el que estoy siguiendo en mi reto Irene-Nigella de completar todas las recetas de este libro (que son muchas…).

Puede que el título no os dé muchas pistas de qué es este dulce (al menos a mí no me lo daba, más cuando ni tan solo había una foto acompañando a la receta). Las maids of honour son unas tartaletas con una base que bien puede ser de hojaldre o similar a una masa brisa, con un relleno muy cremoso que queda a medias entre tarta de queso y crema pastelera a base de nata y con un toque delicioso de limón. Recién sacadas del horno os aseguro que son irresistibles… y después por qué no decirlo, ¡pero también!

Este postre es típico de la repostería inglesa, y solía servirse en las salas de té del refinado Richmond, Surrey. Así que os podéis imaginar el sabor delicado y suave que tienen, ojalá no se hubieran terminado tan pronto.

La receta en sí es muy fácil: la masa no tiene misterio alguno, es mezclar la harina con el poco líquido que llevan y amasar; el relleno es todavía más fácil, se cuecen los ingredientes en una sartén y se deja reposar. ¿Sabéis qué fue lo que me dio más la lata? Poner las bases de las tartaletas cada una en su molde para que quedaran iguales y bonitas… así que ya veis, si no sois tan patosos como yo las haréis en un momento.

Si no os apeteciera hacer la masa casera, perfectamente podéis substituirla por una base de hojaldre del súper. Yo en mi caso preferí hacer la masa porque me relaja hacerla 🙂

Luego, respecto los moldes, yo utilicé un molde de magdalenas clásico, que era lo que tenía por casa y sirvió perfectamente.

Hechas las presentaciones, no quiero retrasaros más la receta que seguro estáis impacientes por leer. Espero que la disfrutéis tanto como nosotros en casita:

Ingredientes:

• PARA LA BASE:
• 300 gr harina
• 75 gr mantequilla ecológica fría, cortada a daditos
• 75 gr margarina fría, a cucharaditas
• 2 huevos ecológicos grandes
• 2 cdtas zumo de limón
• Pizca de sal

• PARA EL RELLENO:
• 1 vaina de vainilla o 1 cdta extracto de vainilla
• 150 nata para montar ecológica
• 50 gr mantequilla ecológica
• 50 gr azúcar
• 50 gr almendra molida
• 1 huevo ecológico grande, batido
• Ralladura de 1 limón y zumo de 1/2
• Nuez moscada

Pasos:

Empezamos con la base, para ello poner la harina + mantequilla + margarina en un bol, y dejarlo reposar en el congelador unos 10 minutos. Mezclar los ingredientes húmedos y dejarlos también en la nevera. A mano o con el accesorio gancho (velocidad media-alta) de la KitchenAid, mezclar la harina con la mezcla de mantequilla y margarina hasta que quede con una textura arenosa, a continuación añadir los ingredientes húmedos y seguir batiendo hasta que la masa empiece a compactarse, luego cogerla a mano y terminar de darle un poco de amasado más.

Separar en dos discos, y dejarlos reposar en la nevera cubiertos con papel film unos 20 minutos más mientras nos ponemos con el relleno.

Precalentar el horno a 220º

Ponerla nata en una sartén a fuego medio con el extracto de vainilla (o la vaina) y calentar hasta que arranque a hervir pero sin que llegue a hacerlo. Añadir la mantequilla + azúcar + almendra molida + ralladura y zumo de limón, batir con unas varillas manuales, retirar del huego y dejar reposar 5 minutos.

Sacar uno de los discos de masa. Espolvorear un poco de harina sobre una superficie limpia, amasar la masa con un rodillo hasta que tenga un grosor de unos 3-4 mm, y con la ayuda de un corta pastas hacer círculos.

Cubrir con papelitos los moldes de magdalenas, y colocar encima los círculos de masa, presionando con los dedos para que quede la base bien cubierta. Repetir este proceso hasta terminar toda la masa.

Rellenar los moldes de tartaletas con unas cucharadas de masa, deberían quedar cubiertos hasta unos 2/3 ya que luego crecen un poco de volumen.

Espolvorear con un nuez moscada si se desea, y hornear durante unos 15 minutos hasta que el relleno esté dorado y haya cogido volumen.

Al retirarlas del horno, dejarlas reposar unos minutos en la bandeja caliente antes de desmoldarlas y pasarlas a la rejilla.

Os recomiendo comerlas ligeramente calientes, son toda una delicia.

Salen unas 20

¡A disfrutar!